Cansado
>> jueves, 30 de julio de 2009
Se sentía cansado. 40 años no son nada, Esteban. Estás en la flor de la vida. Le decían. Se decía él.
A veces, en la calle, algún conocido le paraba. Y la familia? Bien, Mercedes está estupenda, como siempre. Y los niños? Muy grandes ya. Tienen su vida. Y el trabajo? Muy bien, trabajo en el mismo sitio. Ya van cumplirse 20 años de mi primer día en la empresa. La semana que viene.
La semana que viene.
Ella se llamaba Irene. Era una compañera de trabajo. Apenas la conocía. Era joven. Atractiva. Quizás no tan joven. Importaba eso? Ella decía que le quería. Eso sí, eso importaba. Él la quería a ella? Eso, había decidido, tampoco era de las cosas que importaban.
Importaba que iba a cumplir 40. Que llevaba 20 años en la misma empresa. Que su vida, que ya no recuerda cuándo eligió, porque él pensaba que las vidas se eligen, no era la que eligió. No podía ser esa. Tal vez cambió, y nadie le avisó de nada. Y un día se levantó y se sintió cansado. Cansado y aburrido.
Y vino Irene. Y soñó con un nuevo yo. Y le pareció que podía curarle del terrible tedio en que se había convertido la vida que, un día, sin pensarlo demasiado, escogió.
Besos, queridos fantasmas.
A veces, en la calle, algún conocido le paraba. Y la familia? Bien, Mercedes está estupenda, como siempre. Y los niños? Muy grandes ya. Tienen su vida. Y el trabajo? Muy bien, trabajo en el mismo sitio. Ya van cumplirse 20 años de mi primer día en la empresa. La semana que viene.
La semana que viene.
Ella se llamaba Irene. Era una compañera de trabajo. Apenas la conocía. Era joven. Atractiva. Quizás no tan joven. Importaba eso? Ella decía que le quería. Eso sí, eso importaba. Él la quería a ella? Eso, había decidido, tampoco era de las cosas que importaban.
Importaba que iba a cumplir 40. Que llevaba 20 años en la misma empresa. Que su vida, que ya no recuerda cuándo eligió, porque él pensaba que las vidas se eligen, no era la que eligió. No podía ser esa. Tal vez cambió, y nadie le avisó de nada. Y un día se levantó y se sintió cansado. Cansado y aburrido.
Y vino Irene. Y soñó con un nuevo yo. Y le pareció que podía curarle del terrible tedio en que se había convertido la vida que, un día, sin pensarlo demasiado, escogió.
Besos, queridos fantasmas.
4 comentarios :
"porque él pensaba que las vidas se eligen"
para mi la frase clave del relato. ¿Hacemos lo que queremos o lo que nos dejan...?
bss
Un interesante debate, fantasma científico.
Que pensáis al respecto,queridos fantasmas? qué hacéis vosotros?
Hola! estuve releyendo tus entradas y realmente me gusta tu estilo, a veces más mesurado, otras, directamente irreverente! jejje
Te dejo mi voto en la blogoteca!
un abrazo.
Mmmm, qué gusto oir eso. Mi ego me acaba de hacer cosquillas ;-)
Besos, Neo.
Y, gracias de nuevo.
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